El tiempo es el mismo tiempo para todos. Pero lo personalizamos y podemos tomar acciones para usarlo como mejor nos funcione.
El tiempo es difícil de manejar. Yo pienso que nunca tengo suficiente tiempo. Pero, ¿suficiente para qué? o ¿Suficiente en comparación a quién? Todo el mundo tiene la misma cantidad de tiempo, pero se trata de cómo lo manejan, qué deciden hacer con cada hora, y qué han dejado de hacer para lograr aprovecharlo.
En mi día promedio, necesito tiempo para: comer, dormir, aprender, estudiar, socializar, ocio, y hacer ejercicio. Que no me alcance el día para hacer todo esto implica frustración, sacrificios, estrés y ansiedad. Siento el desasociego de no haber aprovechado. Siento la presión del día siguiente que cae sobre mí, con las cosas que no alcancé a hacer y las nuevas que se me van a empezar a apilar sobre ellas.
Pero como todo en la vida, hay que fluir. Para usar el tiempo bien y pasar felices, es necesario organizarse. Organizarse bien, como mejor le quede a uno, pero de tal manera que el método que se use se pueda volver algo casi que automático y nos facilite la vida después de un tiempo, valga la redundancia.
Antes de explicar las herramientas de manejo del tiempo que uso y/o que me gustaría usar más y mejor, tengo que decir que hay una diferencia (y una relación) entre manejo del tiempo y productividad. Tener mejor manejo del tiempo puede llevar a una mayor productividad. Y ser productivo por lo general significa que uno tiene un buen manejo del tiempo. Para mí, son dos cosas distintas: "manejar" el tiempo es distribuirlo de tal manera que yo logre integrar en mi día todo lo que tengo que hacer, de manera balanceada. Ser productivo es lograr generar una buena cantidad y calidad de trabajo (o utilidad) por unidad de tiempo.
La otra es "soy productivo pero...". Por ejemplo, hacer todas las lecturas y entregas y lecturas adicionales es algo productivo, en términos académicos. Pero lograrlo no es un reflejo automático de productividad. También toca sacar tiempo para bienestar, familia, ocio y todo lo mencionado anteriormente. Con esto en mente, las siguientes herramientas pueden servir para tener mejor manejo del tiempo, ser más balanceado, y como resultado, más productivo.
Acá hay unas estrategias que me han servido a mi:
Pomodoro Timer:
es un método para lograr estudiar o trabajar sin distracciones. Consiste en estudiar durante bloques de 25 minutos, con 5 minutos de descanso cuando se acabe el tiempo. Al final de 4 bloques de 25-5, uno se toma un descanso de 15 minutos. Lo ideal es tener el celular lejos, en modo avión. Tratar de concentrarse en la tarea específica durante el bloque, ponerse un objetivo, y usar los 5 minutos de descanso para estirarse, tomarse un vaso de agua, cambiar de ambiente, y volver. Forest App es bueno para esto.
2. Usar un planeador semanal:
Planear semanalmente ayuda a poner todo en perspectiva, saber qué toca hacer por día, y saber cuando es el mejor momento dentro de nuestra agenda para hacer ciertas actividades. (Por ejemplo, ¿me queda mejor hacer ejercicio por la mañana o por la tarde?) En este planeador, a veces puede servir poner las cosas por colores dependiendo de su categoría. Me sirve resaltar con un color lo que no se me puede olvidar. También me sirve poner en un color lo académico, subrayar las entregas, y en otro los planes con amigos.
3. La "flash-card"
Una flash-card o index card es cualquier pedazo de papel o cartulina tamaño 1/4 de carta. La idea es tener varias en la mesa de noche o en el escritorio, y cuando se acaba el día, escribir las 5 (o 10, o 15) cosas más importantes para hacer el día siguiente. Es una manera de despejar la mente para dormirse tranquilo, y también de empezar el día siguiente enfocado. Lo que más me gusta de esta técnica es que puedo empezar mis mañanas leyendo la lista y teniendo claridad, en vez de gastarle tiempo a pensar en qué me toca hacer.
4. Eisenhower Matrix
Esta técnica me la enseñó mi papá. Se trata de una matriz, o una tablita dividida en 4: Lo importante y urgente, lo importante pero no urgente, lo no importante pero urgente, y lo que no es ni importante nii urgente. Basado en estas categorías, es más facil visualizar las tareas en términos de prioridad, y evitar distraerse o procastrinar a la hora de decidir qué ponernos a hacer.
5. Post It con recordatorios
Esta es otra: Cada vez que tengo algo nuevo para hacer pero que me va a tomar más de 2 minutos en hacerlo, lo escribo en un post-it y lo pego en la ventana o en la pared. Me sirve tenerlo enfrente para que no se me olvide. Y además, si no es muy urgente, no tengo la tentación de hacerlo ahí mismo y distraerme de lo que estoy haciendo en el momento.
6. La lista de tareas
Lo que más hago son "to-do lists", o listas de tareas. Consiste en escribir una lista de cosas que toca hacer, e ir tachándolas a medida que las hago. Se puede hacer en un cuaderno, papel, o en una aplicación (yo usaba las listas de recordatorios de apple, ahora uso Notion, pero Any Do es buena, y hay muchas más). Lo bueno del cuaderno es que tacharlo físicamente da una sensación de logro. Pero virtualmente tiene el plus de que se puede programar un recordatorio para la hora o fecha en la que toca hacerlo.
7. Rueda de la vida
Esta última es la mejor para tener consciencia de lo que compone nuestro balance de vida. En una clase de herramientas de la vida universitaria lo hice en una tabla de excel, pero también se puede hacer online o escribirlo (o pensarlo). La idea es pensar en las áreas de la vida a las cuales le dedicamos tiempo, y a cuales le queremos dedicar más o menos tiempo. Organizarlas por categorías ayuda, como proceso de auto-reflexión.
Comments